Beneficios de la práctica musical, una realidad o una quimera.

Al hilo de varias noticias que aparecen en los periódicos de tirada nacional sobre el aprendizaje musical y su favorable impacto en la disminución del fracaso escolar, mejoras de carácter intelectual, social etc. vamos a analizar los hechos que aporta la Neurociencia. Siguiendo con nuestro autor de referencia Mr.Harvey veremos aquellas mejoras que la practica temprana de la música pueden suscitar en nuestros peques. Se sabe que el sistema auditivo se ve afectado positivamente, desde bebes se ha demostrado que la escucha de música temprana ayuda a discriminar sonidos y por tanto tiene una influencia en el lenguaje y su aprendizaje. Además, la función auditiva de los niños que practican música también puede mejorar, también aquellos aspectos relacionados con la psicomotricidad final ya que la función táctil y de control de la propiocepción son innatos a la práctica musical. Además y tal como Hayvey resalta en su libro la práctica musical se hace individualmente y en grupo. Y es el grupo una parte importantísima para nuestros peques ya que tocar música con otros es un hecho que les puede aportar múltiples beneficios. Hoy en día, métodos como el Suzuki (que está practicando el modelo de la foto) en el cual los padres participan y aprenden con sus hijos en clase han marcado un hito en el aprendizaje musical, atrás quedan aquellos años donde había que estudiar mucho tiempo solo en una habitación mirando la partitura sin compañero alguna más que tu instrumento. Además la música se puede interpretar en grupo y eso favorece las capacidad de relacionarse de nuestros peques. Ahora algunas de las falacias con las que he topado. Los niños no van a desarrollar altas capacidades intelectuales por la práctica musical, cada niño es diferente y desarrollará, si el medio es el adecuado, su máximo potencial. Si bien la música no le hará ningún mal tampoco por ello desarrollará altas capacidades, cada niño es diferente y las generalidades no se pueden aplicar. A menudo encuentro a padres que realmente creen que insistir en levar a sus hijos a música les beneficiará de una forma intelectual, si les gusta pues adelante, pero existen muchos niños que no les gusta la practica musical e igualmente podrán desarrollar sus capacidades.