La Lengua inglesa tiene una palabra especial que describe una sensación: "groove". Nosotros desgraciadamente no pero sí describimos "groove" como "esa sensación de moverme con la música, de bailar..."
En el estudio de Kawase recién publicado en la primavera de 2023 en Psychological Research y titulado Is happier music groovier? The infuence of emotional characteristics of musical chord progressions on groove se analiza esta sensación de movimiento a través de la emoción.
Sabemos que la música produce sensaciones y emociones en el ser humano, pero aún son muchos los misterios sobre como las características musicales llegan a afectarnos. Kawase realiza un estudio experimental donde altera elementos de la música, en este caso progresiones armónicas y analiza si esto tiene implicaciones en esa sensación "groove", ese "swimg" que nos impulsa a movernos al ritmo de la música. Y este es un punto clave, el ritmo, porque si se nos mueven los pies con la música es al ritmo de la misma en una sincronización no intencionada.
El autor parte de una importante pregunta ¿La música alegre produce más sensación "groover"?
Una interesante pregunta para la que seguro ya hemos respondido mentalmente pero que aqui nos responden con datos. En un diseño inteligente el autor no solo crea situaciones donde el ritmo es manipulado sino que incluye y transforma la armonía, ese sistema estructural que domina "casi" todos los géneros musicales de nuestra sociedad a través de las progresiones armónicas, y observa las diferencias entre música alegre y triste en la implicación del "groove". Los resultados muestran como el tipo de emoción tiene influencia en esa sensación del "groove", así, los participantes percibieron las diferencias entre música alegre y triste bajo unos parámetros rítmicos definidos y manipulados.
Los resultados son claros, la música alegre parece producir ser más "groovier", lo cual puede ser una señal útil para el escrutinio de las correlaciones entre sensaciones del ser humano, aqui el autor sugiere la relación entre el "groove" y los estados de excitación y activación del sistema de recompensa. Estos estados son muy comunes en nosotros, participamos de ellos todos los días y resulta curioso como la música nos puede conducir a sentirlos.
En resumen, los resultados de este estudio sugieren una relación bi-direccional entre la sensación de necesidad de moverse y las características emocionales evocadas por la música, es esto un punto interesante para campos del conocimiento como la rehabilitación por ejemplo. En todo caso, que la música nos hace bailar es algo que está en nuestra naturaleza y más aún si esta es música alegre, el poder de la música es sin duda transformador y así lo refleja el arte y la ciencia.